miércoles, 5 de noviembre de 2008

SE BUSCA NOMBRE


En algún punto de mi vida, perdí el nombre. Ahora no sé hablar de mi sino con otros heterónomos.

Cuando hablo en primera persona, es por la costumbre de que me llamen de formas distintas. No sé cuando tuvo principio. Siendo yo niña, mi abuelo paterno me decía "cachito", es que era muy pequeña cuando caminé. Sigo siendo pequeña, mido escasos 150cm de altura y mi peso, varía entre los 49 o 50kg, pero ya nadie me dice cachito, es mejor, mi abuelo esta muerto y yo quiero conservar el sobrenombre como un recuerdo exclusivo. Tengo ojos grandes, eso si.

La gente me llama chica, chicú en casa, Bety, comadre, comadreja, Betucha, Lucía, Beatri, Beatriche, Susana, Licú, paradoxia, susanita, Mrs Pritchard, mujerazul, señora, srta.Osornio, Bitrix, darling, mama, mamá, mom, mami, Etcetreadeluz, muchacha, etcetrea, Etcetrea.

A veces, cuando alguien pronuncia mi nombre de la manera correcta, está cargado de extrañeza, suena como si fuera sólo una paradoja de los otros nombres. Será posible que de tanto oírlos, uno llegue a ser todos los nombres con que se nos llama?...será que se llega a vivir mas cómodamente con ellos?

Algunos sobrenombres los inventé yo, como una forma de diversión, eso dicen, y por eso debo acostumbrarme a ellos, pero es, al menos confuso, es como andar de indigente, sin casa, durmiendo en el quicio de algún banco, mercado, asilo, parque, en cualquier orfanato para protegerse del frío en estaciones tempestuosas.

He tocado algunas puertas pero todavía ningún nombre se abre. He recogido objetos del piso, pero no se si mi nombre sea una piedra preciosa o un simple guijarro. Todos los días trato de atrapar aves en vuelo, pero a la mejor el nombre es nadamas una pluma, un suspiro. No tengo casa, vivo donde puedo.

No importa lo que sea legal, lo que digan los papeles que soy, aquí en este país, las mujeres pierden el nombre y todo rastro cuando se casan, adoptan el apellido del marido y lo conservan aunque sean viudas, si se divorcian adquieren otro apellido, nunca el verdadero, esa es la ley o la tradición. Yo quiero encontrar el nombre con el que nací, el que me dieron mis padres. Si alguien lo ve, si lo escuchan, si lo recuerdan diganlo, yo espero, aunque tendrán que repetirlo unas cuantas veces, hasta que suene otra vez familiar.

Los que han perdido algo, un objeto de incalculable valor, un ser querido, saben a lo que me refiero.


Beatriz Osornio MoralesPARADOXIA; Imagen de Giacomo Balla

15 comentarios:

dèbora hadaza dijo...

"Todos los días trato de atrapar aves en vuelo, pero a la mejor el nombre es nada mas una pluma, un suspiro"

eso es la neta y tu nombre es...

Susana de la Libre Esperanza Verdad

te gusta?

te quiero

Escribir, coleccionar, vivir dijo...

En realidad nuestro nombre es un rótulo no elegido. Padres que durante meses o minutos pensaron cómo llamarían a ese ser por nacer. En mi caso fueron segundos, mi mamá dijo Paula y punto. ¿Etimología? La desconocía. ¿Más nombres? ¿Para qué? Con semejante apellido alemán no hacía falta otro. A los siete, en una enciclopedia di con el significado de Paula: "la pequeña", así de simple, francamente una desilusión. Desde entonces odié que me llamarán "Paulita" era como si me dijeran nimia, insignificante, mínima. Y mucha gente cometía el pecado de hacerlo y yo, antipática la mayoría de las veces, decía: "prefiero que me digan Paula, ¿puede ser?".
¡Nombres! En mi blog he podido encontrar mi apodo de guerra: la escriba. Alguien que escribe solo por el placer de hacerlo, sin ninguna otra pretención.
Saludos... ¿a quién? ¿a Beatriz?

Anónimo dijo...

Ya era hora que hablaras de ti. La vida de las personas siempre me ha parecido muy interesante.

Saludos todavia anonimos.

ASIG dijo...

Hola... Pues a nadie le toca escoger su propio nombre... Puede que nos guste o puede que no... A veces tenemos sobrenombres que se dan en un momento determinado y entonces es así como nos llamamos... Cada quien debería elegir como quiere que lo llamen no?? Saludos!

angelica dijo...

Beatriz, pues bonito nombre tienes...
entiendo lo que dices porque igual que tu a mi siempre me han llamado de mil formas diferentes pero siempre me quedo con mi nombre y no lo cambiaria por ninguno otro, con el tiempo me he acostumbrado a su sonido y una de las cosas que mas valoro en un amante, amigo/a o familiar es que sepa llamarme por mi nombre con todas sus silabas...
parece una tonteria,pero que le vamos hacer!yo soy asi!

Lena yau dijo...

Escucha al agua.

Está allí.

Besos, muchos....

(ya me contarás cómo llamarte...)

:)

Abraham Villegas dijo...

Beatriz, espero que encuentres tu nombre. Esta por ahi, y sé que eventualmente aparecerá. Yo sé lo que significa perder cosas o personas. He perdido familia, he perdido mi vida y creí haberla reencontrado. Ahora, en estos momentos, creo que he extraviado la esperanza. Saludos cordiales como siempre :).

MAREADEMOCIONES dijo...

un dia....de lluvia o de sol....alguien te llamará de un modo que querrás quedarte con ese nombre para toda la vida.....

Besos

Jenn Díaz dijo...

Yo nunca me he sentido identificada con mi nombre. Y, cuando apareció Fusa, sentí un alivio. Fusa sí que me gusta. Viene de Jennifer estando confusa, que lo está siempre. Tengo a gente que me llama Jenn, que no me gusta que me llame Fusa. Hay que me llama Fusa, que no me gusta que me llame Jenn. Y hay gente que me puede llamar de las dos maneras. Y después están los de casa, que me llaman Jenni aunque no me guste, pero a los de casa se le perdona ese tipo de cosas.

¿Cómo quieres que te llame yo?

Jo dijo...

me encanto,. a veces es casi como decretar los nombres en pos de que queden guardados en algun eco y se preserven, algunos deseos, algunos tiempos buenos... Adjetivos hay muchos la paradoja es hallarlos todos y que singifiquen una cosa

abrazos varios

Liberto Brau dijo...

En Essaouira-Mogador: Liberto Brau, del clan literario de Pau Llanes (Arterapia Sentimental), les anuncia e invita a la inauguración de su blog “Amanece púrpura”. Se trata de una novela en proceso (alentada de algún modo por “El vendedor de cuentos”) que el autor irá publicando capítulo a capítulo, semanalmente, si se cumplen sus expectativas tanto de lectores como de apoyos en sus comentarios. Para ello recomienda leer entre otros textos de introducción el “Acuerdo del autor con sus lectores”. Ojalá la lectura de este primer capítulo de “Amanece púrpura” les agrade lo suficiente como para motivar sus palabras y comentarios, sostener la espera de nuevas entregas mientras tanto y formar parte de su lista de blogs favoritos. Gracias por su atención y curiosidad, por su lectura, por sus palabras… Y disculpen esta entrada así de sopetón en sus casas; no quiero que crean que lo utilizo como un tablón de anuncios… Me tomé la libertad de hacerlo por la confianza y hasta cierto punto complicidad que me da habernos leído algún día (aun anónimos y silenciosos) y por la oportunidad que nos brindó Arterapia Sentimental para encontrarnos alguna vez en nuestra dispar vida de bloggers… Liberto Brau

REX :) dijo...

Hi!!! hace tiempo que no te visitaba, me gusta la nueva foto que pusiste

Muchos salu2

Anónimo dijo...

Nunca me pareció correcto que la mujer al casarse "pierda" el apellido con el que nació y prácticamente adquiere el de su "compañero", es como una pérdida de identidad, pues es de las primeras cosas que adquieres después de nacer, nunca se devalúa y te acompaña durante toda la vida, es más, lo conservas aun después de morir.
Un apodo o alias es a mi parecer, un buen sustitutivo del nombre, pues muchos me conocen únicamente como Cuervo, como por ejemplo en mis añejas clases de la universidad, así que Paradoxia me parece bastante bien.

BEATRIZ dijo...

A todos mil gracias por su ayuda en el reencuentro con mi nombre como identidad. No me mal entiendan, pueden seguirme llamando Paradoxia o como gusten de todos los apodos que compartimos en este post, solamente queria volver a sentir el nombre de Beatriz como mio, mision cumplida...con creces.
Cuando uno se encuentra en un pais extranjero, con culturas antagonicas a la propia, atraviesa por un proceso de adaptabilidad. Despues del shock cultural, viene el aferrarse a lo que nos refiere de mas cerca a nuestra raiz, el nombre, el idioma, la identidad y el sentido de pertenencia en un grupo de individuos en un pais, en una familia...en eso estoy. El siguiente paso, ya les contare.
Por lo pronto gracias.

Ahora tengo visitas, pero ya pronto estare en sus blogs y aqui con un nuevo post.

BEATRIZ

Jorge Arce dijo...

Yo tengo un segundo nombre con el que no me identifico.Cuando a alguien se le ocurre decirlo, no entiendo, no se de quién están hablando. Para mi hace rato perdió su sentido. Un abrazo

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