martes, 21 de febrero de 2012

EXTINCION



Antes de que existiera el lenguaje hablado, mucho antes de que se perfeccionara la técnica de hacer fuego, sucedió que muchas tribus,  trágica y absurdamente desaparecieron, por la extinción del fuego o alguna otra trivialidad.

Cansados de alimentar el fuego, los hombres de la campiña de la peña,  trajeron sacos de arena desde el cerro que los locales llamaban (de haber existido un idioma) El Cerro de La Caverna, con una furia inexplicable descargaron la tierra sobre las llamas, éstas se fueron extinguiendo, unas de  golpe, y otras de a poco,  quedando las brasas susceptibles tras la humareda,  finalmente entre las cenizas,  el hollín negro y la tierra mezcladas, la noche ya no mostraba vestigios de luz.

Entonces, las mujeres de la tribu iniciaron una danza ritual alrededor la hoguera sofocada, un canto a la memoria del  fuego.

En la obscuridad solo se percibían los pasos rítmicos de pies descalzos, acompasados, fue un canto gutural que invadió la oscura noche,  el aire fúnebre  de aquella tribu en vías de extinción.



Beatriz Osornio Morales Hampton VA. Julio 2011.

Los seres humanos pensamos y apreciamos las cosas cuando ya han dejado de existir, así somos, pero hoy, quiero apreciar la presencia de cada uno de ustedes, mientras todavía estan aquí. Saludos y gracias.

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