lunes, 28 de enero de 2013

La costumbre de las milicias





Ayer una rara especie de helicópteros sobrevolaban el cielo de Michaels Woods, helicópteros militares debo decir.

La gente está acostumbrada al ruido de los aviones de combate que realizan sus prácticas aéreas con regularidad en los aires de este lugar. Sin embargo, lo de ayer fue distinto. “¿Qué estarán planeando ahora las milicias imperialistas?” pensé para mis adentros.

Puedo asegurarles que,  con todo y que la gente oye esos ruidos a cualquier hora del día, solo algunos notaron las extrañas aves volátiles, su ruido es diferente al ruido verde seco  de los raptores americanos,  y su figura dista de la estilizada forma, casi benigna de los aviones guerreros que contrasta con el arrastre de estruendos. Su sonoridad parece surgir y girar al mismo tiempo de arriba y de abajo.

Los objetos volátiles de ayer bien podrían ser helicópteros, por la similitud de su cuerpo y ruido, pero en lugar de una hélice en la parte superior, estos tienen dos, una en cada lado, al frente de lo que podrían ser alas, pero cortas. La cola sigue siendo la de un helicóptero convencional, así como el tamaño mismo y el color de la nave.

Volaban en series de dos. Vi pasar al menos tres pares muy cerca de los techos, mientras imaginaba la vibración que sentiría quien estuviera en el interior de una de esas casas. Afuera, el ruido es fuerte pero las vibraciones no se perciben con la misma intensidad, ni es tanta la molestia de no poder escuchar tu programa favorito de televisión, e intentar adivinar las muecas como en el cine mudo mientras los aviones pasan, o los helicópteros raros. Todo lo militar me sigue pareciendo extraño.

Todavía pensamos en mudarnos como hace siete años que llegamos a vivir aquí. Queremos buscar un lugar más civil, aunque a veces dudo que  se pueda estar lejos,   bases militares donde quiera existen, las milicias son una costumbre humana.



Beatriz Osornio Morales

20 comentarios:

Julie Sopetrán dijo...

Parecen abejorros que asustan, estos aviones militares. Estoy de acuerdo contigo, es mejor vivir lejos de ellos, aunque hoy no hay un lugar lejos... Un abrazo.

Ester dijo...

Siempre habrá un lugar apartado de ellos. Bonitos cambios. Un abrazo

Natalia H. Fontijn dijo...

Ningun lugar como es perfecto. Mi ciudad Caracas, me encantaria pero ahora es demasiado peligrosa, Calgary es demasiado fria, las que me gustan son demasiado caras, en fin, ni kod aqui sigo, el pronostico de la temperatura de manana es -36 grados centigrados (te lo cambio un ratico por los helicopteros jajaj)

Lapislazuli dijo...

Es difícil encontrar el lugar adecuado
Quede intrigada por la forma no habitual de los helicópteros
Abrazo

Gizela dijo...

Debe ser terrible, vivir, cerca de una base militar o un aeropuerto
La contaminación sónica, es verdaderamente de terror, en sus cercanias ..
Abrazotes y lindo día!!

Jesús Galbraith dijo...

Yo vivo en España, también muy cerca de una base militar, y escucho continuamente pasar aviones, tanto por el día como por la noche. En cierto modo estamos siempre en guerra, aunque no nos caigan las bombas en la puerta de casa.

Vagamundo dijo...

Seguro que están ensayando algún commando aéreo para ataques-sorpresa: la brigada "silent storm".
Aún le queda mucho queróseno que gastar en los ensayos...

JOAN dijo...

Todo lo relativo a la guerra me produce un rechazo absoluto, total. Tu historia contada ya me ha generado cierta inquetud. Se cierran hospitales, se masifican clases en los colegios, pero sin embargo se sigue invirtiendo dinero y más dinero en la guerra, en armamento, en nuevas tecnologías para matar más, mejor y con menos gasto...

A veces me gustaría mudarme de planeta!!

Un besote :)

Fina Tizón dijo...

La verdad es que imagino que quien vive cerca de algún aeropuerto o lugar donde sobrevuelan aviones continuamente no debe serle muy grato el día a día y sobre todo las noches.

Un abrazo

Fina

Juan L. Trujillo dijo...

Los militares son loa únicos que se entrenan para inocular el virus de la terrible enfermedad de la guerra.
Lo mejor es apartarse de ellos.
Un abrazo.

lichazul dijo...

a mi más asustan los que se dicen indefensos , pues siempre tienen algo bajo la manga

besitos y feliz semana

del tío Sam la verdad no hay mucho que uno ya no sepa de ellos
basta con meterse a internet y te enteras de un montón de cosas
;)

P. Belano dijo...

Pues ten cuidado Beatriz porque cualquier día paseando por esos bosques te puedes cruzar con una mula robotizada como última novedad en la milicia, jaja. Vivir cerca de un bosque no parece tan malo, salvo por esas acrobacias de cuando en cuando. Mucho peor las zonas industriales.

Saludos !!

Carlos dijo...

Las milicias son una costumbre inhumana díria yo.... (curioso lo último que yo he escrito es sobre banderas y "patrias")

Marcos Callau dijo...

Interesante tu texto y tu blog, Beatriz. Un placer haberlo encontrado.

Luis de Burg dijo...

pues podrías buscar un país subdesarrolado, en ellos la milicia es tan torpe que aún conservan los tanques de la segunda guerra mundial, yo estuve en la milicia, teníamos que empujarlos para que pudiesen andar, en pleno centro de lima al lado del palacio de gobierno, mientras los turistas nos tomaban fotos de nuestra proesa, así es un país subdesarrolado, sin aviones ni helicopteros futuristas, ni pruebas de armas atómicas, existe tanta hambre en estos países, que si compran un misil, la única prueba que hacen es cuando sucede algo y es allí que se dan cuenta si funciona o no, mientras tanto siguen comprando armamento viejo que es descartado por las potencias, entre ellas aviones de la gran madre rusia usados en la guerra fría....

Frases Bonitas dijo...

Pase a saludarte. Besos

Carlos Augusto Pereyra Martínez dijo...

Bueno...se puede uno acostumbrar al ruido, pero quizás no a esa angustia del avión derribado, o preparándose para el combate. UN abrazo. Carlos

José A. García dijo...

SI pasan tan bajo, tan cerca de las casas, significa dos cosas

1 - que están buscando a alguien/algo.

2 - con una buena escopeta se los puede hacer caer...

Saludos

J.

Leovi dijo...

Sí, a mi me obligaron a hacer el servicio militar y fue el año mas raro, más triste, más desaprovechado,... y más feo de mi vida.

MAJECARMU dijo...

Beatriz,vivo en Cuatro vientos,pista de aterrizaje de aviones militares de Madrid y veo muy a menudo los pájaros oscuros por el cielo dejando una linea blanca a su paso...Pero,también está cerca la Casa de Campo donde habitan miles de aves,que también nos visitan,asi que el cielo,mi cielo de Madrid, está siempre lleno de vuelos y presagios,amiga...
Mi gratitud y mi abrazo inmenso por compartir y por tu presencia.
Feliz noche y feliz domingo.
M.Jesús

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