domingo, 27 de septiembre de 2015

REMINISCENCIAS



Ayer el viento matinal era un velo de música
algodón de azúcar desmechado,
sus pelusas un acto de vandalismo
bienvenido,
hacía lucir lúbricas las hojas de los árboles.
El vuelo,  su forma fue conmigo al mercado
vino,  a donde quiera
que yo iba se colaba sin invitación,
en la casa me siguió, de la habitación al pasillo
y de vuelta en las escaleras.

Todo indica que ayer
el mismo viento sintió agitación;
 la crónica se colgó de mi falda.
Las paredes se convirtieron en opera
 me sorprendieron comprando ropa.
Fue una llamada de atención
lo comprendí en la parada del bus,
donde me alcanzo el grito categórico
del medio día.

 Por un momento ceso el aire,
las palabras hablaron de un viaje,
un regalo y un hijo.
Al salir de afuera  me olvide de todo.
Pero hoy  aquí adentro en el espejo
volvió a cantar el pájaro  del recuerdo.
Yo que sufro de arritmia verbal
y pérdida de  memoria,
salte dentro de mi propia piel,
se agitó como polvo el alma oscura y olvidada,
saltaron sus plumas desprendidas  del azul.

Tome lápiz y comencé a escribir, escribí algo
que no tiene parecido
con el aire matinal, la epitomía del lirismo,
 un canto.
Me fastidian las repeticiones,
las rimas forzadas solo tienen
que ver con los hábitos de lo humano,
o acaso sean
 reminiscencias de un vuelo innato.


B.O.M, imagen de la red.


11 comentarios:

jfbmurcia dijo...

Me has hecho pasear sintiendo el aire que te rodeaba. Saludos, amiga.

Rosa Mª Villalta dijo...

¡Escribe fabuloso! ¡Precioso poema!
Abrazos.

Buscador dijo...

El viento del otoño trea cosas lejanas que acompañan como el viento. Aspiro hondamente mis sentimientos y expulso mi mirada en todo lo que me rodea...El placer de vivir es agradable con solo dejarme llevar por el viento de mi memoria...Doy saltos en el tiempo con una memoria juguetona de paseo por las calles que me llevan a otras calles con gente que me cruzo casi siempre sola. Mi piel se eriza al contacto con el viento que anuncia lluvias, tan esperadas como este lapsus donde me cuento cosas. Es agradable el otoño. Mi soledad y mi silencio hacen las paces dejando pasar una reminiscencia de cosas antiguas con años lejanos. Me miro al espejo con mi mirada en mi mirada presente en mis pensamientos. Escucho mi respiración y de mi boca, nace una sonrisa...


Me ha encantado tu poema.

Sara O. Durán dijo...

Me hiciste vivir un sueño... me ha encantado este poema. Te luciste, Beatriz!!!!
Un abrazo grandote y de anís.

Rendan Laveriz dijo...

"Tomé un lápiz y comencé a escribir" Así mostramos lo que pensamos, lo que sentimos, lo que somos. Un abrazo compañera

Jav dijo...

pensamiento enhebrado con el hilo que vamos desenrollando sin querer no hacerlo para no perder lo que la mente siempre traviesa repiquetea con ansias liberadas

Conchi dijo...

¡Que bien, el viento matinal se cuela sin invitación también en tu poema para traerlo hasta mí! Muy bello Beatriz.

Un beso.

Sneyder C. dijo...

El otoño tiene una hermosa manera de hacerse notar, entre ellas ese viento matinal que te hizo tomar el lápiz y comenzar a escribir….


Un cálido abrazo

Julie Sopetrán dijo...

Las rimas si son forzadas no tienen la frescura de la Poesía... Tu poema se dejó llevar por la brisa matinal y nos regalaste un momento mágico. Muchas gracias por tus versos, Beatriz. Besos.

taty dijo...

El momento, el viento, el lápiz y el papel: todos pequeños pájaros que han echado en volar en la bandada de este poema.

Besitos, linda, feliz semana :)

Carlos Augusto Pereyra Martínez dijo...

Nada más vergozoso que esribir como epitome de otro, hacer rima por hacer. Como en tus versos, dejas fluir los tuyos que hagan la memoria de tus cosas, frescas y naturales. Un abrazo. Carlos

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