miércoles, 15 de julio de 2015

Todos sabemos del tiempo

"Desintegración" Salvador Dalí

I

Una fecha más se cumple todos los días,
la conciencia de ello  lo vuelve inevitable.
Se buscan  antídotos contra el mal  tiempo.
Si es bueno que se detenga el momento preciso,
pero hay casualidades que no llegan
ni con la utopía ni en la  ciencia.
La rueda del tiempo no se detiene,
ha sido por los siglos invencible.

Los humanos hemos intentado  romper el absurdo
untándonos las miradas de los amorosos,
 la caricia,  el beso;
cortamos flores para evitar que se mueran
porque algo nos dice que entre los afectos
todo se salva,

al centro de la mesa o entre las páginas
de un libro, las flores están a salvo del frío,
del calor, el polvo y la ferocidad  del hambre;
un juego inverosímil quizá, y el invento del misil
pudo haberse gestado en charlas de café
a sabiendas del beso,

en medio de guerras nos ocupa enjugar
 lágrimas de hombres, mujeres y niños
sin otro recurso que
 el contenedor de las manos,
 la imaginación, los ensueños en esquirla
o la inocencia del recién nacido,
salvan todo eso, más, pero aun argumentamos

¿Quién estableció el asunto
del tiempo, cuándo?
¿Ya era y  lo descubrió  
un nómada en su aburrimiento,
lo percibió
como pájaro en vuelo?


Beatriz Osornio Morales. Imagen de Salvador Dalí.


Entrada destacada

Sin que la noche sepa

  Plantaré flores sin que la noche sepa, lejos de todas las ausencias. Porque aún siento la oscuridad reírse en  mí,  con sorna, de lo cómic...