viernes, 20 de agosto de 2010

UN LUGAR EN LA ESTANCIA

Después de la habitación, la ventana de cristal es la segunda parte en importancia en cualquier estancia, tratese de la casa, de un hotel o albergue de paso.
Asomarse al exterior puede parecer insignificante, pero al contrario de ser ambiguo, se asoma uno a la ventana para ver un mundo entrar y sentarse en el mismo sillón que nosotros, desde donde se hace el mundo a la medida de los ojos.
El exterior también se asoma a su ventana, más acá de las cuatro paredes del marco el exterior habita.
Algo aparentemente insignificante como la ventana, se convierte para el observador en otra recamara. Un ser que se asoma a la ventana para mirar, entra en una habitación privada.


Beatriz Osornio Morales

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