Sin Tiempo
Relojes de arena y astrolabio
No hay tiempo en este tiempo esquivo
de febrero a marzo,
ni en otros cuencos, otros aromas donde
pasamos las horas complacidos.
Para hablar de nosotros
nunca hubo tiempo, en nuestros
acicalados cuerpos, saltaron
los minutos al vacío,
se les subieron las hormigas
a la cara.
Ni tiempo para decir
lo que al tiempo encierra.
En esta hoja
de cuerpo displicente, un tumor
de silencio invernal habita,
tu hueco protesta
de que sólo halla sabia dormida,
y un sol rojo que abrasa
madura tus ausencias.