RAICES
En otra habitación la
voz se encuentra a oscuras
solitaria, escucha
un golpeteo en copa de vidrio
derramado, aquí
hielo el aire habla presagios>
el viento se dibuja
en serpientes de agua,
esta ciudad se inunda de polvo
y mi voz habla
a obscuras,
solitaria,
se oye como si fuese otra cosa,
subterránea, nota fría que bebe
el vino de golpe derramado.
En las cantinas
reza la estupidez despreocupada.
La voz de una madre reza
en una habitación silenciosa.
De los amantes reza el recuerdo,
nuevos deseos e interminables locuras,
sus ecos rezan
en la yema de los dedos.
De las semillas que preñan el suelo
hablan sus brotes,
desde allí rezan las voces de la vida.
Beatriz Osornio Morales, Hampton Va. Marzo 2011